260 páginas
(Julio 2015)
Hay decisiones que marcan a fuego, y perdones que se venden muy caros.
Los errores siempre dan paso o a una reconciliación o a un final.
Un matrimonio sin rumbo. Una mujer en rebeldía. Un hombre que lo cambió todo.
Uno siempre valora lo que tiene cuando ya lo ha perdido.
¿Y tú qué harías por...?
Los errores siempre dan paso o a una reconciliación o a un final.
Un matrimonio sin rumbo. Una mujer en rebeldía. Un hombre que lo cambió todo.
Uno siempre valora lo que tiene cuando ya lo ha perdido.
¿Y tú qué harías por...?
MI OPINIÓN
Este segundo volumen pierde la intriga y la sorpresa que proporciona el primero. En realidad ambos libros son un todo y deberían ser un único libro. Al final el consigue que ella se sienta la culpable total y responsable del fracaso y durante mucho tiempo cambia la percepción de Zac y su forma de actuar. Pero me ha parecido triste que al final tanta responsabilidad sobre el fracaso caiga sobre los hombros de ella y se valore tan poco el error de Zac y su incapacidad de reconducir la situación con su mujer, Liv tiene derecho a desencantarse de un matrimonio que parece caer exclusivamente sobre sus hombros. Y aunque el final es el previsible en un libro romántico y él consigue enmendar parte de sus errores, deja un regusto amargo. Zac díó por supuesto que el amor es eterno aunque no lo cuides y eso es para mí lo fundamental, si él la hubiera cuidado un poco más ella ni se hubiera planteado el problema económico de la situación porque por el trabajo de Liv eso no era un problema, pero cuando uno se siente ninguneado todos los problemas se agrandan y todo se tiene en cuenta. Lo mejor del libro, el disparate que monta él para ¿reconquistarla? o en realidad para perderderla.
⭐⭐⭐⭐⭐⭐⭐✪✪✪
Este segundo volumen pierde la intriga y la sorpresa que proporciona el primero. En realidad ambos libros son un todo y deberían ser un único libro. Al final el consigue que ella se sienta la culpable total y responsable del fracaso y durante mucho tiempo cambia la percepción de Zac y su forma de actuar. Pero me ha parecido triste que al final tanta responsabilidad sobre el fracaso caiga sobre los hombros de ella y se valore tan poco el error de Zac y su incapacidad de reconducir la situación con su mujer, Liv tiene derecho a desencantarse de un matrimonio que parece caer exclusivamente sobre sus hombros. Y aunque el final es el previsible en un libro romántico y él consigue enmendar parte de sus errores, deja un regusto amargo. Zac díó por supuesto que el amor es eterno aunque no lo cuides y eso es para mí lo fundamental, si él la hubiera cuidado un poco más ella ni se hubiera planteado el problema económico de la situación porque por el trabajo de Liv eso no era un problema, pero cuando uno se siente ninguneado todos los problemas se agrandan y todo se tiene en cuenta. Lo mejor del libro, el disparate que monta él para ¿reconquistarla? o en realidad para perderderla.
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"Amad y cuidad lo que tenéis, antes de que la vida os enseñe a amar lo que perdisteis."
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